lunes, septiembre 23, 2013

Comenzamos



Hoy hemos tenido la primera reunión con las familias y casi el pistoletazo de salida del curso. Tenía algunas cosas esperando para comenzar en las que era importante explicarles a mis "mamis y papis" lo que yo entendía por leer y escribir, cuando les pedía a sus hijas e hijos que lo hicieran.
Así que a partir de mañana ya empezaremos a llevarnos el diario a casa, el periódico y la libreta de los textos, aunque aún no dominen con soltura el código.
Leer con ellas y ellos, investigar en libros "de mayores", trascribir lo que escriben a "su manera" son prácticas que las mamás y los papás de mi alumnado no han vivido, pero que en cuanto se las explicas, no solo las entienden mucho mejor, que a veces quienes somos profesionales, sino que les notas en la cara que les encanta la idea y que están dispuestas a emocionarse con sus hijas e hijos.
También esta semana vamos a empezar el trabajo por rincones dos días en semana, los martes y los viernes. Para empezar, vamos a plantear cuatro rincones: rincón del arte, de los juegos, la tienda y la biblioteca.
Como empezamos el proyecto "Nos conocemos mejor" el rincón del arte lo vamos a dedicar a la figura humana en el arte, pintura y escultura y el de la biblioteca a preparar exposiciones orales sobre algunos aspectos que ellas y ellos han decidido investigar para conocernos mejor.
Los lunes después del recreo, vamos a alternar: Tertulias literarias, asamblea, exposiciones orales y trabajo con cortos. De este modo la oralidad va a ser un plato fuerte dentro de nuestra planificación. El texto expositivo oral, la argumentación, el debate..., nos van a servir para expresarnos mejor.
Hoy ya hemos hecho nuestra primera tertulia literaria, al final se me ha olvidado grabarla para poder analizar con el grupo después lo que habíamos hecho bien y lo que debíamos de mejorar.
La consigna hoy era hablar sobre el primer libro que se han llevado en préstamo de la biblioteca de aula: el título, de que trataba, con quien lo habían leído en casa y si les había gustado o no.
Solo seis o siete se han atrevido a hablar, aunque a la hora de preguntar a quienes hablaban se han atrevido un poco más.
Nos hemos sentado en un corro grande y yo entre ellas y ellos, sin embargo, al empezar a contar me miraban a mí, así que les he ido pidiendo que al hablar mirasen al resto de sus compañeras y compañeros pero no a mi, y yo he intentado no devolverles la mirada, de modo que he conseguido "un poquito" que la tertulia sea entre todo el grupo, aunque "de vez en cuando" tenía que recordarles que no solo hablaban conmigo. Yo también les he contado el libro que estaba leyendo y que es lo que más me gustaba de él.
La siguiente que hagamos quiero que gire en torno a un mismo libro que hayamos leído todo el grupo, ya os contaré.
Para ser la primera vez no ha salido del todo mal, aunque el rol de oyente también necesita un trabajo de mejora en el grupo.
Mañana decidiremos el nombre de nuestro blog y para la semana que viene ya estará en marcha, aunque aún no sé como nos las vamos a arreglar sin ordenador ni acceso a internet, bueno, si lo sé, aunque cada vez que lo pienso la rabia y la indignación me corroen.
Lo haremos con "mi ordenador" y con la tarifa de internet de "mi móvil", al igual que los libros de la biblioteca de aula son "mis libros", así que prefiero pasar de puntillas por ese tema para no robarle al día de hoy la ilusión de un comienzo.
Nos vamos a pesar y a medir y vamos a trabajar los números, las diferentes unidades de medida, los conceptos de mayor y menor...
También vamos a escribir nuestra autobiografía para conocernos un poquito mejor.
Ufff!!!!!!!! cuanto trabajo por delante, pero me emociona pensar ya en los "productos finales"

viernes, septiembre 06, 2013

Un camino común


El martes al salir del cole a las dos de la tarde, cansadas, hambrientas y con una sonrisa cogimos el coche para volver a casa mi compi Mª José y yo, al entrar ella me dijo partida de risa como si se tratase de la travesura más divertida:
.- Te das cuenta Carmen que después de 30 años de trabajo nos atrevemos a volver a empezar de cero una vez mas.
A mi que me encanta reírme con ella solo se me ocurre decirle:
.- Nosotras vamos a acabar empezando.
Y es que Mª José y yo juntamos nuestra vida profesional hace más de 20 años cuando nos dieron a la vez la definitiva a las dos en el mismo colegio. Un colegio grande y antiguo en todos los sentidos peyorativos del término.
Un año después, tuvimos la suerte de que el cole se desglosara y al colegio nuevo pasamos "la última generación" de docentes con quienes vivimos la fantástica aventura de poner en marcha un centro que partía de cero y en el que se reunía un grupo pequeño de personas que teníamos muchas ganas de que todo marcara diferencias.
Ella fue durante esos años mi compañera de ciclo y la persona que me animó a cambiar mi mirada a la educación.
Para mi fueron cuatro años maravillosos llenos de mucho trabajo, de entusiasmo, de risas, de inventar cosas nuevas, de trabajar en grupo, de aprender otros modos de ir a la escuela, de equivocarnos de forma divertida y mejorar analizando los errores...
Y se acabó, y separamos nuestros caminos físicamente porque yo tuve que cambiar de cole, pero no profesionalmente porque habíamos formado un vínculo de "formación" tan grande que lo hemos seguido manteniendo hasta hoy.
Pero años después tuvimos otra vez la ocasión de empezar un proyecto juntas, esta vez en el Centro del profesorado como asesoras participando en la planificación de una formación de la que llevábamos años siendo usuarias "al otro lado".
Fueron ocho años irrepetibles de  llenos de mucho trabajo, de entusiasmo, de risas, de inventar cosas nuevas, de trabajar en grupo, de aprender mucho otros modos de ir a la escuela, de equivocarnos de forma divertida y mejorar analizando los errores, y de soñar con la posibilidad de trabajar juntas de nuevo en un cole, pero a sabiendas de que los sueños, sueños son.
Y se acabó, y separamos nuestros caminos físicamente, porque ambas volvimos a la escuela y a centros diferentes con la seguridad de que esas aventuras de trabajo conjunto eran como dos loterías que habíamos tenido la fortuna de disfrutar pero que no nos volvería a tocar.
Y de forma increíble ahora, este curso, se nos ofrece de nuevo la posibilidad de participar juntas en la puesta en marcha de un centro nuevo con un grupo de docentes geniales con ganas de trabajar, con entusiasmo, queriendo inventar cosas nuevas, trabajar en grupo, aprender mucho otros modos de ir a la escuela, y equivocarnos de forma divertida y mejorar analizando los errores...
Y dejamos la comodidad de ir andando a nuestros centros, de una rutina ya aprendida y volvemos a coger el coche para hacer un camino que nos lleva a..., no sabemos bien a dónde porque el final aún estar por construir, pero que nos hace reírnos de nuevo y tener un proyecto común.
Llevo unos días en que me descubro sonriendo cuando estoy sola, porque aunque sé que esto es también temporal y que se acabará más pronto que tarde, voy a estar rodeada del optimismo de mi compi Mª José, de su hablar pausado e inteligente, de su análisis positivo de las personas, de su defensa vehemente de la escuela pública, de su capacidad de guiar a su alumnado con seguridad, con paciencia, con cariño, con respeto, con ese respeto tan profundo de quien está totalmente convencida de que las niñas y los niños tienen pocos años pero una gran inteligencia.
Y aunque ella es la culpable de que yo inicie esa sonrisa, por supuesto, en ella hay un lugar para Loleta, Paqui, Sofía y para el  resto de compañeras y compañeros que conozco menos pero que en estos días me han parecido geniales.