miércoles, diciembre 31, 2014

Nunca dejé de escribir





Solo diez entradas en 2014, no salgo ni a una por mes. Me da penilla tenerte tan abandonado, sobre todo porque fue gracias a tí que yo me atreví a escribir en público. ¡y me gusta!
Al principio no sabía que contar, ¡¡tardé tres años en coger carrerilla!! y es que me costaba mucho pensar que otros podían leerme. 2010 fue la "repera", 98 entradas.
He perdido el miedo a escribir y he descubierto que es mi asignatura pendiente.
¿Sabes? mientras conducía o limpiaba, o estaba en la cama a duermevela he escrito muchas cosas para tí que luego no he tenido tiempo de contarte.
Pero no he dejado de pasar por aquí porque no escriba, sino porque ahora he encontrado muchos otros lugares donde hacerlo.
Abrir mi primer blog de aula "Estrellas de Primero" fue toda una experiencia fantástica al volver al cole después de ocho años de asesoría en el CEP donde ya también había encontrado un huequillo interesante con otras personas para compartir experiencias interesantes "Aprender hablando", que se ha convertido en uno de mis lugares de escritura más entrañables.
Este año, mi nuevo blog de aula "Gnomitas y Gnomitos" tiene doble de encanto, ya que me permite abrir la puerta de mi aula y también que en algunas de las entradas ya me va ayudando mi zagalería.
Pero también han ido apareciendo otros lugares.
Me topé con "Palabras azules" y me pareció un proyecto apasionante, allí he dejado algunas de mis publicaciones sobre la escritura. Sobre todo, es un baúl cargado de ideas originales al que siempre puedo recurrir.
En marzo, me encantó participar en el blog "Escuelas en red" con la experiencia de mi primer huerto escolar, aunque después de enviársela, me pareció genial como Rodrigo J. García le dio forma y la contó en el blog, un lugar fantástico que desde que lo conocí, es para mi un referente para acercarme a experiencias impresionantes que publicitadas en un medio de comunicación importante, muestran una escuela maravillosa, con fuerza, innovadora, que emociona...
Más adelante por culpa de mi amigo Jose Luis Castillo, me vi envuelta en una aventura que me resultó apasionante, Jose Manuel Martos me pidió que contara mi historia de aprendizaje en su blog "Voces de aprendizaje", así "Maestra de a poquito" se convirtió en todo un ejercicio de memoria y un saborear la escritura, volviendo a lugares casi perdidos en mi memoria. ¡Cuanto disfruté revisando fotos!
También por culpa de otro amigo y maestro, Fernando Trujillo, me vi envuelta en otra crónica en el blog "EvaluAcción", después de vivir una última aventurilla evaluativa con mis criaturillas: hacer de forma conjunta una rúbrica para evaluar los rincones de trabajo.
También esta Navidad he estado inmersa en otro relato para la Revista Aula sobre Competencia Lingüística que acabo de mandar hace un par de días.
Ya ves que aún pasando poco por aquí no he abandonado el vicio de narrar, y como propósito de año nuevo ya ando pensando contarte algunas de mis historias.





martes, diciembre 02, 2014

“Escribir a mano es del siglo pasado”



“Escribir a mano es del siglo pasado”. Este es el título de un artículo que encontré en facebook y que podéis leer completo en el blog de Enrique Dans.
El autor del artículo comenta la decisión de Finlandia de sustituir el aprendizaje de la escritura a mano por la escritura con teclado.
Todos los cambios generan polémica y si invaden el terreno de la educación mucho más. En educación mejor ser conservadores que andar haciendo la revolución, por lo que pueda pasar.
De hecho el sistema educativo está montado para enseñemos a nuestras “crías” a vivir en nuestra sociedad.
Atreverse a inventar o imaginar otra sociedad posible y educar pensando en un futuro diferente siempre entraña un gran riesgo para quien se atreve.
Aparecen en seguida las premoniciones de grandes catástrofes, de futuras decadencias, de derrumbe de los cimientos de nuestra sociedad.
Pero la realidad de la historia nos enseña que el mundo avanza y no estamos en las cavernas gracias a “las grandes locuras” a mentes excéntricas y geniales que en su momento se atrevieron a soñar y a crear instrumentos o ideas novedosas, futuristas, rompedoras.
Leer y escribir desde el principio de nuestra historia han sido herramientas que han dado acceso al poder.
“El siglo pasado” como titula el artículo nos llevó a conseguir alfabetizar (en el primer mundo) a un porcentaje elevado de la población que hoy no tiene problemas de acceso al código escrito.
Pero mientras nosotros hemos enseñado el utillaje, el oficio se nos complejizado de tal manera que los aperos con los que comenzamos nuestro aprendizaje ya no nos sirven para completar la labor, a menos que no queramos ir más allá.
Pero no ir más allá vuelve a significar depender de quienes saben usar las nuevas herramientas que se convierten en los nuevos poderes establecidos.
La escuela tiene poco tiempo para enseñar todo lo que demanda la sociedad actual, por eso debe pensar muy seriamente que es lo importante y que lo anécdótico, que es lo que va a acercar al alumnado a “poder estar” y ser parte “poderosa” de la sociedad y que le va a condenar a ser parte de la sociedad dependiente y tiranizada.
¿Y todo esto que tiene que ver con aprender o no a escribir a mano?
El aprendizaje del trazo se realiza en edades muy tempranas en las que escribir una letra supone un enorme esfuerzo de control mécanico de la mano, en muchos centros se pasan cuatro años de la vida de una criatura aprendiendo el trazo de las letras y apenas la escritura de unas palabras o frases pequeñas. Los años, además en que se sabe que la mente humana tiene más capacidad de aprendizaje.
Cuatro años para una actividad que apenas ya nadie realiza fuera de la institución escolar.
Yo creo que ha llegado el momento de plantearse seriamente la oportunidad o no de esas prácticas.
La escritura con ordenador nos permite muchas cosas que el papel no nos permite a la hora de escribir.
Desde eliminar la dificultad del trazado hasta la gran oportunidad de mejora de textos sin repeticiones tediosas.
Aprender el código con el teclado facilita el aprendizaje de la escritura y ganaríamos tiempo para otras cosas. Aprender el trazado de las letras, si queremos podría incluso ser posterior al aprendizaje de la escritura, ¿porqué no?
De cualquier manera, el aprendizaje de la escritura va incluso más allá del aprendizaje de la mecanografía y centrar los primeros aprendizajes solo en la herramienta, sea lápiz o teclado, es un error tremendo. Los primeros aprendizajes deben centrarse en el aprendizaje de la escritura de textos reales con usos reales. 
Ahora mismo parece impensable en nuestras escuelas esa propuesta, no porque no sea la mejor para nuestras criaturas, sino porque el profesorado que las puebla no tenemos capacidad para emprender esa marcha y la administración que nos paga no tiene la valentía de destinar los recursos necesarios.
Pero está claro, que la alfabetización del siglo XXI pasa por una nueva alfabetización, más allá del trazado de las letras y que las pequeñajas y pequeñajos a quienes se dejan estas herramientas parecen tener una capacidad innata de aprendizaje más allá de la que tenemos los adultos .

“La mente que se abre a una nueva idea, jamás volverá a su tamaño original” (Albert Einstein)

sábado, noviembre 22, 2014

Se le hace una caja de pobres


La escuela está llena de anécdotas, la mayoría de ellas las acabamos olvidando y otras las mantenemos siempre ahí, como recuerdo imborrable de que educar tiene su punto divertido.
Pero sobre todo las anécdotas que suceden en nuestras aulas, muchas veces, son auténticos tratados de pedagogía si sabemos mirar más allá de lo divertido.
La última que os puedo contar en mi clase sucedió el día 20 de noviembre Día Internacional de los Derechos de la Infancia.
En mi cole propusimos hacer una especie de puzzle con cajas. A Cada clase se le asignó un Derecho y se le pidió que decorasen la clase con algo alusivo a ese Derecho: palabras, fotos, dibujos…
Con todas esas cajas íbamos a construir el “castillo de los Derechos de la Infancia”.
En mi clase nos correspondía el Derecho a la protección de la Infancia y realizamos otras actividades que podéis ver en nuestro blog de aula, una de ellas fue escribir en parejas como contar a nuestras familias en el blog que era el 20 de noviembre.
De pronto me encuentro con que una pareja ha escrito:
“Hoy vamos a contaros los derechos de los niños y niñas. Hay niños que no pueden ir al colegio porque tienen que cazar en una selva, por eso, “SE LE HACE UNA CAJA DE POBRES”
No pude aguantar la risa.
Les expliqué que la caja que acabábamos de forrar no les servía de nada a los niños que tenían que trabajar para ayudar a sus familias y que era solo como un juego para celebrar un día en el que celebramos que esos derechos existen.

Creo que la reflexión sobre lo que queremos conseguir con nuestras propuestas y lo que realmente conseguimos debería de ser mucho más profunda.


martes, octubre 28, 2014

Borradores




Revisando el historial del blog he visto que no tengo ninguna etiqueta que ponga "borradores" y de repente me ha parecido imperdonable el olvido, que seguramente se deba, a que yo en este blog escribo mucho con la mente y no siempre tengo tiempo para teclearlo. Hoy por fin inauguro la etiqueta con una actividad sobre mejora de textos.
Es importante que vayamos desde el principio acostumbrando a nuestro alumnado a que cualquier texto tiene un proceso de mejora.
Poco a poco tenemos que ir haciéndole ver cuales son las mejoras que pueden hacerse y en que ámbitos del lenguaje tenemos que ir actuando.
Normalmente cuando son pequeños (y no tan pequeños) la corrección queda en nuestras manos y somos nosotros quienes "calificamos" subrayando o señalando en rojo “las faltas” que el texto tiene.
También suele suceder que cuando son pequeños les dejamos escribir tan poco y con tan poco sentido que realmente apenas hay nada que corregir más allá de la ortografía.
Sin embargo, y sin quitarle para nada a la ortografía la importancia que tiene, hay aspectos de la escritura que “apenas enseñamos a mejorar" y que después, casualmente nos quejamos mucho de su carencia en el alumnado.
Por eso es tan importante que los procesos de mejora de los textos no solo los haga la maestra o el maestro, sino que sea de manera conjunta unas veces y el alumnado solo o en parejas o en pequeño grupo en otras, ayudándose de pautas o guiones que les sirva para saber que queremos mejorar y en que vamos a centrar la mirada.
Son muchos los aspectos de mejora de un texto (cohesión, coherencia, adecuación del texto a la comunicación, presentación, aspectos gramaticales) por lo que en cada corrección es imposible abordarlos todos y debemos ir planteándonos en cada actividad de escritura cual nos interesa más abordar de forma que nuestras niñas y niños sean capaces de abordar cada vez más y mejor cada una de ellas.
Una de las últimas actividades en la que hemos puesto en práctica la mejora de borradores ha sido en torno a la escritura de problemas de matemáticas dentro de la secuencia didáctica sobre el precio de los materiales del colegio y sobre la que si queréis saber más, está ya contada en el blog de aula y la actividad concreta de escritura en el blog "Palabras azules" donde tengo la suerte de colaborar.
En esta ocasión la mejora que me interesaba abordar estaba relacionada con la coherencia del texto: pertinencia de la información y la estructura de la misma relacionándola con el tipo de texto.
Como anteriormente habíamos visto otros modelos de este tipo de estructura textual y además habíamos hecho en primer lugar una mejora colectiva de uno de los problemas, cuando yo les pido que en pareja mejoren uno de los que otros compañeros habían escrito, tenían clara cual era la consigna y en todos los casos menos en uno la mejora consigue que el escrito se adecue con bastante exactitud al tipo de texto que pretendíamos escribir.
Sin embargo, y aunque yo no les pido una mejora ortográfica esta también aparece en los nuevos escritos, aunque no es el objetivo y desde luego siguen quedando cosas por corregir, pero eso será en otra ocasión, que nos queda mucho camino por recorrer.
También estamos usando el diario de aula para aprender a mejorar nuestros textos. El último que corregimos aprovechamos para ampliar nuestro vocabulario de emociones y si el curso pasado siempre poníamos lo que más nos gustaba y lo que menos nos gustaba, estamos dando un paso más a la escritura de como nos sentimos.
Cada lunes en lugar de leerlos todos en voz alta que son muchos y se acaba haciendo lento y pesado, cada niña o niño lo lee en su grupo de cuatro, de modo que todos lo leen, el resto del grupo tiene la consigna de darle al menos un consejo para mejorar su texto: a veces le pido que sea sobre el contenido, otras veces si podría haber utilizado otras palabras que "sonaran mejor", si ha repetido expresiones,
Con la mejora de cuentos, nos hemos dado cuenta que al narrar repetíamos mucho la "y" y eso nos ha llevado a buscar otro tipo de conectores.
...

En definitiva, lo que queremos aprender es que casi nunca "escribimos al tirón" y que cualquier texto es siempre susceptible de mejora.
De este modo validamos cualquier escritura, pero siempre en proceso de mejora y aprendemos que todas y todos sabemos a escribir a nuestra manera y que sea cual sea esa manera siempre es y va a ser mejorable.





viernes, septiembre 19, 2014

"A mi manera"

Andamos comenzando el curso y luchando con las temperaturas y las malas noticias de un comienzo de curso especialmente duro para la escuela pública: recortes, aumentos de ratios, falta de recursos, temperaturas en las aulas que sobrepasan los 30º...
Entre todo eso, siempre queda lugar para la esperanza y merece la pena el esfuerzo y la lucha dentro y fuera de las aulas.
Pero la lucha de dentro, tiene muchas recompensas en ocasiones sorprendentes y mágicas.
Hoy ha ocurrido en mi aula una de esas cosas pequeñas que lo mismo para mucha gente pueden resultar tontas e insignificantes pero que a mi me tienen todo el día con una sonrisa algo bobalicona.
Los primeros días son siempre un poco locos mientras acabamos organizando material, programaciones...
Además hoy, teníamos muchas cosas por hacer distintas y eso siempre origina un poco de caos.
Teníamos pendiente el libro regalo de cumpleaños de Vanessa en el que cada compi la dibuja y la describe, estamos haciendo con Taxedo nubes de palabras donde cada uno pone veinte palabras que describan como es y luego elige la forma que quiere darle a la nube, tenemos que acabar las entrevistas que vamos a hacer a diversas personas del centro, estrenábamos sesión de lectura en silencio en la biblioteca del centro y teníamos trabajo por rincones a última hora.
En toda esa maraña de criaturas que acababan una actividad y pasaban a otra “a su ritmo” he recordado que no tenía música preparada para la relajación después del recreo.
Rápidamente, mientras salían al patio, me he ido a youtube y no sé muy bien como, porque yo andaba buscando otra cosa, me ha salido un vídeo de Frank Sinatra y su “My way” y con eso me he quedado para no perder mucho tiempo.
Al entrar, he puesto la música y me he sentado a relajarme yo también con los ojos cerrados.
Sonaba genial en medio del silencio del aula.
De repente he escuchado una vocecilla traviesa que rompía el encanto del momento:
- “Seño”
Por supuesto, la he ignorado totalmente y he continuado con los ojos cerrados, pero, segundos después he escuchado otra que decía:
- “Seño”
Yo muy metida en mi propia relajación he seguido haciendo oídos sordos, pero claro, ya andaba notando yo que esas vocecillas habían desconcentrado al resto, cuando ya escucho una voz algo más elevada:
- Carlos está llorando.
He abierto los ojos y me he encontrado con un “Carlillos” totalmente emocionado con la música que estaba escuchando.
- ¡Han roto un momento mágico! ¿verdad Carlos?
Algunos para disculparse han vuelto a repetir:
- Es que estaba llorando.
Rubén entonces ha dicho:
- Pero es que a veces el llanto es de alegría.
A muchos otros les había emocionado muchísimo la canción y hemos estado hablando un rato de la magia de la música y como puede conseguir hacernos sentir emociones fascinantes.
Algunos querían que la volviera a poner, pero me he hecho la dura, porque la relajación ya estaba rota.
Pero, sin duda, el lunes repetiremos de nuevo con Frank Sinatra y también he pensado que voy a llevarles la letra en inglés y en español y tengo la sensación de que “My way” me va a dar mucho juego.
Por lo pronto, ha conseguido hacerme sonreir toda la tarde!!!!


Decir las cosas que realmente siente
y no las palabras de alguien que se arrodilla.
Mi historia muestra que encajé los golpes,
y lo hice a mi manera.




jueves, agosto 21, 2014

Gracias Mariano

He recibido “El Gurrión” una revista que dirige Mariano Coronas Cabrero y que recoge la vida Labuerda y de la comarca de Sobrarbe, una revista con un regustillo a escapada rural, a paseo por la ribera del rio y a la fortaleza de la montaña.
Una revista, que en pleno agosto de la costa del sol, parece traer un soplo de aire fresco, de soniquete de árboles mecidos por un brisa fresca.
Una revista que en esta época de prisa, de ritmo frenético, vuelve la mirada hacia lo lento, hacia el pasado, hacia nuestras raíces, hacia lo sencillo..., hacia lo importante.
Y así, nada más recibirla, la abro por “donde caiga” y leo un pequeño artículo con el título “ Los libros que me cambiaron la vida” y que hace una reseña del libro “José, un hombre de los pirineos” y mientras lo leo parece que vuelve a mi la imagen de mi abuelo, sus manos rudas, su andar cansado de hombre muy gastado por el trabajo y sus ojos nobles y limpios de quien ha enfrentado la vida con abnegación, con honradez, con fortaleza.
Seguiré acercándome a ella los próximos días, para poco a poco cotillear entre el pasado y el presente de esas tierras alejadas, que gracias al trabajo y la generosidad de quienes hacen posible la revista, llegan a mí y me regalan unos paseos tranquilos por ellas.

Acompaña a la revista un pequeño librito homenaje a su director, Mariano, recién jubilado, aunque seguro, este nuevo estado no conseguirá alejarlo de la revista, ni de la escuela que tanto le debe.

Se trata de un Abecedario:


Mariano Coronas Cabrero:
Amigo de sus amigos
Bibliotecario vocacional
Creativo empedernido
Defensor de la lectura

Continúa con todo un abecedario de los que a él tanto le gustan, pero que en esta ocasión, alguien (imagino que entre sus compañeras o compañeros de cole) le ha dedicado buscando con cada letra cualidades y valores que definen a este gran MAESTRO que ha dedicado su vida a la educación y que ha sido para muchas otras personas que nos dedicamos a educar, un ejemplo.
Desde que tuve la suerte de escucharlo hablar sobre bibliotecas escolares, ha sido para mi uno de los referentes en el mundo del libro, de la lectura y del entusiasmo y el amor por la educación en general.
En la “G” a Mariano lo definen de manera tremendamente acertada como “Generoso con sus ideas” porque lo mismo te proporciona “10 definiciones de Biblioteca escolar” cuando solo le han pedido dos o tres que comparte de forma cotidiana en la red sus experiencias, sus ideas, su modo de ser maestro con mayúsculas.
Querido Mariano, jubilarse es fantástico (y más en los tiempos que corren) pero cuando lo hacen personas tan valiosas como tú, queda un regustillo amargo, porque la escuela pierde mucho y no está la escuela para grandes pérdidas.

Me consuela saber que andarás por ahí cerca, compartiendo “Solidario con los demás” tu saber y tu optimismo y que “Poeta en los ratos libres” seguirás contándonos tus andanzas y acercando tu pueblo y tu entorno a quienes queremos disfrutarlo, aunque solo sea al abrigo de las letras.


martes, julio 01, 2014

¿Un meme?



Meme, uhmmm me suena a raro, sin embargo, la idea de preguntarme sobre algo y encontrar respuestas me ha parecido interesante.
He buscado por ahí el origen del "palabro" y lo que más me ha gustado buscando mucho más allá de la décima página que nos ofrece Google ha sido esto: "Es una palabra derivada del griego "mimema" que significa "algo imitado" y hace referencia a una forma de propagación cultural donde las personas transmiten memorias sociales y culturales entre sí" 
En este caso, parar y pensar porqué escribimos me parece un ejercicio interesante y aún más después de iniciar una cadena de lecturas hacia atrás en busca de otras respuestas. Buscando el "paraiso original", paré al fin la búsqueda en la entrada de un escritor de relato corto @slambridis y algunas de sus respuestas sobre escribir de las que me apropio:
"la narrativa siempre me ha parecido la mejor herramienta para estudiar los cerebros de los demás y el mio"
" leer. Leer leer leer leer leer leer"
"Una historia se acaba cuando se siente como una naranja, acabada y perfecta" (más o menos)
Me llega a través de @patisukiya y su blog "Patapalo y sus grumetes", a Patricia tuve el lujo de desvirtualizarla en el último EABE14 y me encantó su sonrisa, sus ganas de hacer una escuela mejor, así que ahora cuando me pasa el testigo, solo puedo recogerlo y decir que me siento muy orgullosa de que se haya acordado de mi.
Como parece que el testigo hay que pasarlo a tres personas, he decidido que lo continúe mi amiga y genial maestra Carmen Pérez Romera de la que nunca he dejado de aprender como docente y como persona y cuyo blog "Aula de infantil" es para mi un lugar de referencia.
También lo paso a un maestro entusiasta donde los haya Luis Alfonso Salvatela porque es una de los docentes que conozco que más creen en las posibilidades de su alumnado y para darse cuenta solo hay que pasearse por su blog "Cuaderno de bitácora de un aula de infantil"
Por último, a otra gran maestra y mejor amiga, Paqui Espinosa, con un ruego, que retome la escritura de su blog "Diario de una madre con mirada de maestra" porque me encanta leerla y aprender de ella que es para mí uno de los mayores ejemplos de mujer fuerte y luchadora.

Y ahora sí, vamos a ello:

¿Sobre qué estas escribiendo últimamente?
Ufff sobre demasiadas cosas, aunque todo relacionado con la educación, con lo que hago, con lo que aprendo.
En este pequeño rincón personal al que me gustaría dedicarle más tiempo, mi blog de aula, el blog de nuestro grupo de trabajo, el blog del cole, el blog del igualdad del sindicato...
¡Demasiados lugares!
La narrativa de lo que pasa en nuestras aulas es una actividad importante que puede aportar muchísimas cosas:
A las niñas y niños un medio de ver que su trabajo tiene importancia, se difunde y se comparte y eso aumenta la motivación y el sentido de la escritura en el aula.
A las familias les encanta encontrar ese “agujerillo” para ver que pasa con sus criaturas.
Como docentes, el intercambio de experiencias nos enriquece y nos ayuda a aprender junto con otras personas.
A mí, me reconforta saber que ayudo en todos esos ámbitos y también me sirve como modo de reflexión sobre lo que hago, cómo lo hago y cómo mejorarlo.


¿En qué difiere mi escritura de la de otros que desarrollan el mismo género?
En todo y en nada. Yo soy yo y por lo tanto mis narraciones son únicas.
Sin embargo, somos más cada día las personas que abrimos ventanas en los colegios.
En mi caso la perspectiva de las emociones es importante e intento trasmitirlo en lo que escribo, contando cómo intento que mis niñas y niños en mi aula sean personas felices, comprendidas y con sentido crítico.
Pero son muchos los espacios que leo que tienen ese mismo enfoque, por lo tanto no hago nada diferente, en todo caso, me encantaría, aprender a escribir mejor como algunas de las personas que leo.
Atreverme a usar la escritura en la red ha sido un modo de mejorar mi propia escritura y de mejorarme como docente.

¿Por qué escribo lo que escribo?

Porque me encanta hablar con la gente, me encanta compartir lo que hago, lo que siento, lo que pienso...
Porque creo que hay otro modo de hacer escuela que no es trabajar con el dictamen de las editoriales y que para eso es necesario tener una batería de experiencias, ideas, modos de actuar en el aula que funcionan y que es necesario poner en común.
La red nos ofrece la oportunidad de una formación compartida y de esa reflexión sobre la práctica que a veces en los entornos cercanos no es posible.
Me encanta centrarme en lo que siente mi alumnado cuando aprende y en el modo en que lo hace, porque, a veces, contamos solo las producciones finales, los grandes “espectáculos educativos” cuando realmente lo maravilloso está en cómo comparten aprendizajes y en las dificultades de organizar ese pequeño micromundo.
Por eso, me gusta ayudarme del vídeo, porque a veces la narrativa sola no es “creible” y mucha gente necesita ver el cómo y el cómo es más sencillo de lo que pensamos, solo necesitamos creer en las posibilidades de nuestras niñas y nuestros niños.

¿Cómo es mi proceso de escritura?

Complejo, como todo proceso de escritura, y diverso.
Primero selecciono lo que escribo con criterios que se pueden deducir de lo que ya he escrito hasta ahora. Intento transmitir que mi alumnado aprende mientras se lo pasa bien, que lo hace de manera inteligente y que avanza hacia una autonomía en su aprendizaje cada vez mayor y que todo eso se hace a través de pequeñas actividades que enlazan el camino aun proyecto común en el que todas y todos participan sin excluir a nadie.
En general planifico lo que escribo mientras conduzco, friego, plancho o mientras me duermo...
Muchas de esas planificaciones se quedan en el tintero por falta de tiempo, pero cuando por fin encuentro el momento, pongo en la pantalla todo lo que he ido pensando.
Releo mientras escribo, borro, cambio párrafos y me pregunto mucho si quienes lo lean entenderán lo que quiero transmitir.
Cuando creo que está, le doy a “vista previa” y lo leo al tirón, bueno no, nunca del todo porque siempre encuentro, cosas que mejorar, sobre todo en la forma de expresión o errores ortográficos, a veces se me escapa alguno, sobre todo, me suelo pelear con los acentos.
Uso mucho el diccionario de sinónimos para no repetirme o encontrar el matiz que le quiero dar a una palabra.
En mi blog de aula suelo ser más rápida que en el resto.
En este, en concreto, a veces, dejo reposar lo que escribo, para volver en otro momento.
Una parte importante en mi proceso de escritura es la lectura de otras personas que escriben sobre educación y a las que admiro por sus experiencias y sus modos de contar.





domingo, junio 15, 2014

Palabras azules



Unas semanas de locura, recién acabada nuestra semana del arte y ya preparando nuestra semana de teatro que comienza mañana, además de nuestro baile para la fiesta final de curso y nuestro huerto que empieza su época de recolección.
Todo eso aderezado con dos fines de semana fuera de casa, el primero, participando en las Jornadas Confederales de la Organización de Mujeres de los STEs: Claves feministas para una sociedad enferma y el segundo,  en el Pleno federal de enseñanza de USTEA.
Pero, ya hoy, le voy a dedicar un "huequillo" a mi participación este curso en un proyecto que me ha parecido muy interesante y en el que ha sido un lujo poder participar, tanto con el relato de algunas actividades como con dos secuencias didácticas, una sobre el diario y otra sobre las diferentes versiones de un cuento.
Para quienes no lo conozcáis aún, solo aconsejaros que no tardéis ni un minuto en hacer una visita a su blog y a la web del proyecto.
Se trata de un proyecto colaborativo creado con el objetivo de recoger, organizar y compartir actividades, experiencias y secuencias didácticas en torno a la expresión escrita.
El éxito del proyecto y la calidad de los trabajos presentados le ha llevado a recibir varios reconocimientos muy merecidos y el agradecimiento de muchas personas a las que nos va a servir como referente a la hora de recoger ideas y experiencias para trabajar la expresión escrita en nuestras aulas.
Por eso, yo hoy desde mi modesto lugar de escritura, quiero agradecer muy especialmente el esfuerzo y la dedicación de las personas que han coordinado todo ese "batiburrillo de ideas y de ilusiones" y a todas las que han participado para hacer este lujo de repositorio de grandes ideas. Creo que tiene un mérito especial dedicar parte de tu tiempo de forma desinteresada a realizar un trabajo que va a ser útil a otros y por el que no vas a recibir nada a cambio.
Palabras azules está lleno de horas de ilusiones de muchas personas que creen que la escuela puede y debe ser un lugar de aprendizaje y también un lugar donde la fantasía, la creatividad y la magia tengan cabida.




jueves, mayo 22, 2014

Final del proceso formativo "La Semana de los Proyectos"


Todo comenzó con gominolas!!!!!!!!!!!!!
Seguro que hay quien piensa que no es una manera seria de empezar un curso de formación para el profesorado, pero...
¿Hay algo mejor que arrancar un trabajo duro, lleno de incertidumbre y miedos con algo dulce, lleno de color y acompañado con las ironías sabias y llenas de humanidad y profunda pedagogía de Miguel Ariza?
Pues no!!!!!!
Y tenían el sabor de una apuesta segura.
Una apuesta que lleva la marca de un trabajo muy serio que siempre se presenta en un formado divertido que invita a la risa, al buen humor, al optimismo, a la esperanza.


Porque... sin duda educar es caminar en la esperanza de que con tu trabajo contribuyes a conseguir una sociedad mejor.



Y  acabó con galletas, pestiños y chocolatinas!!!








Y también con un salón lleno de docentes que llevan meses trabajando en equipo, haciendo grupo, intentando repensar su formación, su modo de avanzar en el difícil oficio de que niñas, niños, chicas, chicos, aprendan cosas sintiendo que el aprendizaje es un camino importante, que la educación tiene sentido, que ir a la escuela o al instituto es algo útil.
Hemos tenido la oportunidad de escuchar en pequeños resúmenes que se revolvían traviesos intentando extenderse porque la intensidad y la calidad del trabajo necesitaba tiempo y cinco minutos para recoger la ilusión, el trabajo, el entusiasmo de los más pequeñajos pero igualmente de sus profes, claramente se mostraban insuficientes.
Y es que las personas adultas cuando nos atrevemos a dejar entrar la vida a la escuela nos entusiasmamos tanto o más que nuestras criaturas y vivimos entre la incredulidad y el orgullo los logros que estaban agazapados esperando que les dejáramos mostrarse.


Y eso hace que en una tarde como esta, tal vez hayamos desaprovechado la ocasión para hablar sobre todo lo que ese trabajo tiene detrás:
La planificación, la coordinación docente, el repensar la educación, el abrir la mente a otros modos de relacionarse en el aula, con las familias...
Pero solo había un pequeño espacio de cinco minutos...
...y casi todos hemos elegido mostrar a los demás nuestras obras compartidas llenas de ilusión y ganas de seguir caminando.
Atrás quedan unos meses de trabajo conjunto en los centros, de reuniones (siempre con demasiada prisa) en las que hemos hablado de proyectos, de cómo investigar en el aula, de trabajo colaborativo (de su ruido y de su poder curativo) de evaluación, de inclusión, de cansancio, de ilusión, de dudas, de incertidumbres, de PEDAGOGÍA.
Pero después del contar, nos hemos permitido el lujo de poder trasladarnos a cada uno de los centros participantes con una minúscula pero fantástica muestra de ese trabajo.





Y hemos paseado entre los ramajes del impacto en el aula de una formación coherente con la metodología que predica "a aprender se aprende haciendo".
Una formación que pone gominolas y chocolatinas, mientras exige que te pongas a caminar y que no te preocupes de caer, que lo importante es levantarse y continuar camino, con la seguridad de que cada paso nos va a abrir camino a nuevas incertidumbre, nuevos retos, pero también a nuevas ilusiones.
Una formación que evalúa su éxito con pruebas evidentes de trabajo en el aula, de innovación, de cambio metodológico, de trabajo significativo, de colaboración con las familias y con la comunidad.
Y todo eso gracias sobre todo,a docentes que cada día se plantean el modo de crecer profesionalmente, pero también al esfuerzo de asesoras como mi "compi Ana" que están seguras de que tipo de formación realmente llega y como no, de grandes luchadores por el cambio como son los miembros del grupo iCOBAE 




sábado, abril 12, 2014

Sonreir es tan fácil!!!!!!!!!!!







Lo descubrí un día en el desayuno de Carlos, Un plátano decorado con un muñecote muy divertido, no pude por menos que esbozar una sonrisa y preguntar quién era el artista de tamaña obra de arte:
- Mi madre, me respondió divertido el dueño del plátano.
A partir de entonces, todos los días acudo a la "caza" de la obra de arte y me imagino a la mamá de Carlos, con sueño, en zapatillas, haciendo un gran esfuerzo por apartar el cansancio para comenzar con fuerzas el nuevo día y con un rotulador en la mano preparando el compañero de viaje de Carlos, el "dibu" que despertará su sonrisa.
Me la imagino tallando sin prisas el flequillo travieso de la manzana.
Me la imagino también esbozando una sonrisa que tiene el poder de convertir una pieza de fruta en algo especial, mágico.
Lo que ella no imagina es que el poder de esa sonrisa consigue también infundirme a mí fuerza y ánimos y que cada día ese pequeño monigote que ella fabrica despierta también en mí una apacible sonrisa.





sábado, febrero 15, 2014

"de a poquito"



Ultimamente cada vez que vuelvo aquí, ha pasado más tiempo, con todo lo que yo quiero a este rincón que fue mi inicio en este loco mundo del aprendizaje compartido en "red".
Y es que he ido diversificando tanto, que casi cualquier cosa que escribo tiene otro lugar donde ir y apenas me queda tiempo para mi "primera criatura".
Por si tuviera poco, acabo de abrir un nuevo blog para #eduPLEmooc, una nueva aventura que está volviéndome un poco más loca y espero que un poco más sabia.
Y hoy escribiendo mi tarea en en este nuevo espacio, me he visto utilizando una expresión que necesitaba un enlace que yo no tenía, así que he decidido crearlo.
"De a poquito" es una expresión, casi de ánimo en nuestro grupo, y nos la regaló nuestra Myriam, con una anécdota que contó en una de sus visitas a Almería y que casi  me parece un atrevimiento narrar, porque no seré capaz de recrear la intensidad con la que ella nos la transmitió, pero necesito recuperarla para que cuando la use, quienes la lean puedan entenderla, ya que no es una expresión solo de calma, es mucho, muchísimo más que eso, es toda una lección maestra.

Contaba Myriam que un día llegó a un aula donde llevaba a cabo una investigación con la maestra y encontró un niño un poco triste, ella le preguntó por el motivo de esa tristeza y él le contestó, que la maestra había reñido a otro niño de la clase porque no había sido capaz de acabar un trabajo.
Myriam le preguntó, bueno ¿y tú que piensas que debía haber hecho la maestra?
El pequeño contestó seguro y sin titubeos:
.- Decirle: no te preocupes, seguro que "de a poquito" tu también puedes hacerlo.

Desde entonces ese "de a poquito" nos ha acompañado en todas las épocas difíciles de nuestro aprendizaje como docentes, a algunas, nos acompaña incluso en las etapas difíciles de nuestra vida.
"De a poquito" es para nuestro grupo una expresión de ánimo, pero también un "piénsalo de nuevo", no te apresures, no juzgues antes de tiempo, entiende lo que pasa antes de actuar...
Toda una lección de pedagogía comprimida en tres palabras y dictada por un niño de infantil.
Porque ellos muchas veces son capaces de ver mejor que nosotros como enfrentar los problemas.