domingo, abril 19, 2015

"Es moderno ser clásico"


Es fantástico que llegue el fin de semana y poder disfrutar de levantarse sin despertador, vagar por casa en pijama y que te te duela la espalda, pero del sofá.
En realidad esos fines de semana son tan irreales que precisamente por eso son maravillosos.
Luego están esos otros que están llenos de cosas tan interesantes que incluso consiguen que merezca la pena no pasear el pijama todo el día.
Este fin de semana ha sido uno de los segundos, pero fatalmente a demasiada gente se le ha ocurrido que coincidan actividades excepcionales por lo que no me he podido permitir el lujo de disfrutar de todas.
Por un lado #EABE15 un encuentro al que he ido todos los años desde que comenzó, y que he tenido que abandonar en esta edición, aunque he tenido dos buenas embajadoras @sofiadeza y @Anisyu que se que me van a contar de primera mano y a borbotones las ideas, los proyectos, las ilusiones y las emociones que han vivido junto a gente que es feliz en la educación.
Porque si me pidiesen que definiera con una palabra el tipo de educación que define a EABE yo utilizaría esa palabra “Educación Feliz” y no solo pensando en el alumnado, no, sino algo mejor “Educación Feliz” pensando en el profesorado que acude cada año con el estandarte del ánimo, la alegría y el optimismo.
#EABE aporta contacto con amigos cercanos en las redes y las ideas, pero lejanos en el espacio, a los que una vez al año puedes abrazar de verdad, con la ilusión de desvirtualizar a esas otras personas a las que admiras o las que sigues y de las que aprendes.


También estos días, tenía lugar en Madrid un encuentro interesante e imprescindible “Encuentro social yde debate: “Por otra política educativa”, un movimiento que pretende realizar una propuesta educativa que suponga una alternativa a la LOMCE y a todo el movimiento actual que está degradando y machacando a la escuela pública.
“Por otra política educativa” es un movimiento interesante que surge desde un grupo de personas expertas del mundo educativo, comprometidas con la Educación Pública y comprometidas con la idea de que desde abajo se pueden cambiar las cosas.
También aquí he tenido la suerte de tener una relatora de lujo, mi hija Rocío, que viene entusiasmada de la fuerza de las ideas, de las grandes ideas. 
Me ha emocionado escuchar su relato del encuentro, su emoción de conocer personas que son referentes para quienes creemos que la ciencia educativa realmente es la pedagogía y que nuestros laboratorios son las aulas y los centros, pero quienes estamos inmersos en la práctica educativa, necesitamos también de personas que nos ayuden a ver y analizar lo que hacemos, la teoría que subyace en nuestro día a día y como avanzar en la mejora.


Pero yo tenía un compromiso muy especial, las jornadas “Es moderno se clásico” a las que no podía faltar porque las he visto gestarse desde el inicio y porque sabía que iba a merecer la pena tanto como cualquiera de las otras dos propuestas. Desde luego no me he equivocado.
Y es que desde hace mucho tiempo tengo claro que cualquier propuesta que venga de la mano de Marisa Zapata y Mª Jesús Escarabajal, es una propuesta a la que merece enormemente la pena decir que si. Ellas son el alma de  la Asociación ALIN, yo diría que ellas son ALIN y a pesar del trabajo y las dificultades son incansables.
Estas jornadas forman parte de la celebración de la XXXII edición de las Jornadas de Teatro del Siglo de Oro, con las que se pretende divulgar el teatro y a cultura de los siglos XVI y XVII y durante las que todos los años junto con los CEPs de la provincia se organizan unas jornadas de formación del profesorado en torno al teatro y a la literatura del Siglo de Oro.
Este año se le pidió a ALIN que se encargaran de organizar las jornadas y, como no podía ser de otra manera, nos han ofrecido un día de lujo con reflexiones y experiencias que han ido más allá de lo escolar.
Han sido cuatro conferencias diversas, complementarias y motivadoras al máximo, con emociones en todas e incluso con dosis de controversia que nos lleva a remirar los objetivos con los que abordamos las cosas.

Empezamos la mañana recogiendo la carpeta, pasando por la firma y abrazando a personas conocidas a las que hacía tiempo que no veía.

La primera conferencia con Rosa Navarro, yo la conocía por sus Clásicos escolares, pero no había tenido la suerte de escucharla nunca, por eso, no imaginaba que sería una charla de reir y llorar, que estaba ante una mujer capaz de emocionar con la palabra. Eso es algo mágico, así que si tenéis la ocasión de escucharla alguna vez, no dejéis de hacerlo.
Os dejo un párrafo escrito por ella que resume muy bien su sentir, su deseo de llegar a todos.

“Suelo contarles a los niños mis sueños: cómo en ellos se me aparecen los grandes escritores, me dicen que están muy tristes porque los pequeños no pueden leer sus obras y me ruegan que se las cuente. Y yo les doy ese gusto, y me lo doy a mí: cada niño que lee un clásico con placer, por diversión, es una pequeña victoria de mis sueños. Sólo así el Cid, Tirante y Carmesina, Lazarillo, don Quijote y Sancho, Ulises, Preciosa… dejarán de ser sólo nombres y serán auténticos personajes. Viviéndolos, les darán vida los niños, los adolescentes: el futuro de nuestro país. Los cuadros, si no se miran, no son más que lienzos; los libros, si no se leen, no son más que un montón de páginas. Las imágenes, los colores de los cuadros cobran vida con la mirada; las palabras, las historias de los libros, con la lectura.”


Después Fernando Lalana nos acercó al teatro y a lo que puede conseguir con algunos chavales cuando se les da la oportunidad de disfrazase y meterse en la piel de un personaje.
Fernando nos contó anécdotas divertidas en las que los clásicos se habían convertido en auténticas herramientas para ligar.
También habló de esos profesores que consiguen llegar al alma de las chicas y los chicos e inocular en ellos el amor por la literatura.
Todo eso aderezado con el regalo de su voz recitando algunos textos y es su voz, como algunas otras privilegiadas, tienen un don especial para llegar adentro.


La tarde comenzó a las cuatro con Toni Solano, mala hora para una conferencia, salvo que seas un mago de la educación e hipnotices al público con la varita del trabajo bien hecho.
Con él pudimos ver que el alumnado de secundaria si quiere trabajar y trabajar duro, pero que tienen que verle un sentido a su tarea y que cuando lo hacen la nota es lo que menos le importa.
Gurú fácil de encontrar en las redes, desprendido con su trabajo y un ameno conferenciante. Ha sido genial poder conocerlo en vivo y en directo, porque yo ya hacía tiempo que lo seguía en twitter y en su blog “Re(paso) delengua” y que sus trabajos me parecían un referente del que aprender siempre.



Para acabar, Pepe Cañas, nuestro Pepe Cañas, el maestro al que tienes que acudir sin falta si quieres que el teatro en la escuela sea algo más.
Escuchar a José CañasTorregrosa es respirar una escuela donde caben todos, una escuela transformadora, una escuela de las emociones.
Pepe se nos ha jubilado, pero sabemos que está ahí y él mismo nos abrió la puerta de su casa para que lo abordemos siempre que lo necesitemos.
Acaba de escribir un libro "Un taller de teatro" en el que nos plantea algunos de los pasos que el ha seguido camino del teatro.
Después, el teatro de verdad en el Auditorio Maestro Padilla precedido de un ratito de charla en torno a una cerveza y unas tapas, en el que echamos de menos a algunas personas, recordamos el #EABE15 y nos enteramos que Toni Solano es casi almeriense.
Todo un maravilloso día en el que aunque cansada, volví a mi casa, contenta, muy contenta.




3 comentarios:

Toni Solano dijo...

Gracias, Carmen, por unas horas tan agradables y por una jornada tan acogedora. Es difícil volver a la normalidad después de tanto apetito educativo :)

Unknown dijo...

Gracias por tus palabras y por ese cariño especial que en ellas destilas. Es cierto, nos sentimos muy bien. Almería tuvo el pasado sábado mucho de mágica y entrañable, y tuvo a bien abrazarnos con la palabra. Un abrazo especial para ti.

Carmen Cañabate dijo...

Tenemos un trabajo bonito y duro a la vez, por eso escuchar palabras de optimismo, de buen hacer, de confianza en el "se puede" es un bálsamo mágico en estos tiempos en los que parece querer imponerse a toda costa la desesperanza.
Nos regalasteis una buena dosis de ilusión y ganas de seguir adelante.